Ayer viernes 29 de octubre a eso de las 12:00 PM mi abuela venía de la feria y en la esquina de Manuel Montt ( donde está la panadería Vimon) , había un joven de más o menos de 25 años, contextura gruesa y no muy alto, que le empezó a pedir ayuda para encontrar a un dentista ya que según él era oriundo de Chillán y se había ganado una “rifa” y su patrón lo mandó donde este dentista que lo iba a ayudar a cobrarla porque él era analfabeto y trabaja desde muy pequeño con el supuesto “patrón” ( contando una triste historia a mi abuela del supuesto niño campesino, pobre, analfabeto, etc.).
Posteriormente, le mostró un papel que supuestamente le había entregado el patrón para que le pasara al dentista (supuestamente él no sabía leer) el cual decía “cobra el dinero y dale solo un poco por que él no se dará cuenta” ) a lo que mi abuela pensó inmediatamente que iban a estafar al “pobre” joven. En ese momento, pasó un segundo hombre (alto, delgado, bien vestido, que decía ser de Penco y trabajaba en un supuesto banco) que “escuchó” lo que el “pobre joven” relataba y supuestamente quiso ayudar también pidiéndole el “boleto ganador” que resultó ser un Kino, el cual supuestamente fue a revisar y efectivamente el joven era “ganador”.
El tipo le dijo al joven y a mi abuela que fueran mejor a hablar a la plaza que ahí los podían escuchar y era peligroso, a lo que mi abuela acepta (ella siempre pensando en el pobre cabro analfabeto que querían estafar, además que había vivido una historia tan triste). Llegaron a la plaza, el supuesto desconocido empezó a aconsejar al joven, diciéndole a él y a mi abuela que hablaran bajito para que nadie se enterara porque era peligroso porque podrían estafar al “pobre niño”. El joven se mostraba muy nervioso, cabizbajo y temblaba a lo que mi abuela pensó que tenía hambre y frío, por lo que le preguntó, él dijo que sí y que buscaba un lugar seguro donde quedarse mientras podía cobrar su boleto para poder ayudar a su pobre abuelita postrada y le pidió a mi abuela si ella le podía dar alojamiento, mi abuela, amablemente accedió y lo invitó a su casa a comer, además le dijo que si quería podía quedarse puesto que ella vive sola (el peor error de su vida).
Al llegar a la casa de mi abuela (en Cerro Alegre) le sirvió café y se sentaron a la mesa (el supuesto ejecutivo obvio fue con ellos para ver qué pasaría con el joven), al estar en la casa mi abuela se comenzó a sentir mal por lo que tuvo que asistir al baño (seguramente le dieron algo), no recuerda muy bien lo que pasó debido a que se comenzó a marear. Cuento corto, en la casa le robaron todo: plata, tarjetas, celular y revisaron toda su casa. Cuando mi abuela salió del baño ya no estaban y se habían llevado todo incluso le sacaron toda la plata de su tarjeta y avances con las tarjetas de crédito dejando a mi abuela a la deriva.
Por favor ruego si alguien de Cerro alegre vio a dos tipos de estas características, hablarme por interno o si alguien vio esto en el centro de Tomé ya que lo necesitamos para la investigación que se lleva a cabo. También, les pido como nieta aconsejar bien a los adultos mayores de no confiarse de la gente por más triste que le cuenten la historia y si ve algo extraño en el centro, acercarse a ayudar a nuestros abuelitos. Esto está pasando en Tomé, hay que cuidar a los adultos mayores.
La denuncia ya está hecha en Carabineros de nuestra ciudad «.